lunes, 9 de julio de 2018

LA INDEPENDENCIA DE ARGENTINA - SEGUNDA PARTE

  En Argentina se le llama Reconquista a la espantada de los Ingleses cuando nos invadieron. En España, la Reconquista tiene dos connotaciones, una cuando expulsan a  los musulmanes y a los judíos en 1492, que acabo con la multiculturalidad y los empobreció tan gravemente que aun lo sufren,  y otra connotación que hace referencia a cuando espantaron a los franceses y a Napoleón.
  Mientras España luchaba contra las fuerzas napoleónicas, los americanos la tuvimos difícil porque no coincidíamos ni concordábamos en la forma en que lograríamos independizarnos y porque había mucho realista suelto por estos lares.
  Las condiciones a partir de 1815 se volvieron “chungas” con la caída de Napoleón y la Restauración de las Monarquías Europeas.
  Fernando VII nunca se creyó que nos manejábamos solos en su nombre. El tipo siempre supo que nos manejábamos solos y en su pensamiento eso teníamos que pagarlo con la vida.
  Los movimientos de independencia en Argentina y en Venezuela eran fuertes debido a la abnegada labor de  San Martín y Bolívar, sin ellos otra sería nuestra historia.
  San Martín sabía que Aníbal había cruzado los Pirineos en elefante para atacar a Roma y se le ocurrió que si el cartaginés podía nosotros también. Eso es muy argentino si se nos ocurre una idea podemos hacerla realidad, siempre que queramos claro.
  Concentró en Mendoza todas sus fuerzas para atacar a los realistas por sorpresa desde el suroeste una vez cruzada la Cordillera de los Andes.   Sabía que iba a ser un cruce difícil, pero no imposible.
  Tal vez pensó que, podíamos hacerlo porque seamos sinceros, no teníamos elefantes que cruzar y si ese tipo cruzó elefantes, unos cañones eran un equipaje más sensato.
  Buenos Aire se despertó de una bofetada con este plan conocido al inicio por muy poca gente. El congreso en Tucumán nombro al nuevo Director Supremo, una especie de Presidente. El elegido fue Juan Martin de Pueyrredón.
  El 9 de julio de 1816 se declaró en la “Casita de Tucumán” la Independencia de las Provincias Unidas del Sur.
  No hubo acuerdo inmediato para sancionar la Constitución de la Nación hasta 1853 y ese es el motivo de nuestras Alegrías y Tormentos. Sin embargo, el equipo lista para entrar en la cancha como lo está hoy, como rezo para que este mañana.
  Porque si nuestros Padres Fundadores son de 10 y nosotros somos gente de 6 o 7 puntos, tenemos HAMBRE de GOL y queremos ser de DIEZ y  aunque suframos tanto en tiempo extra con los penales en eso estamos…

Lía Olga Herrera Soto

domingo, 8 de julio de 2018

LA INDEPENDENCIA DE ARGENTINA - PRIMERA PARTE

  Siempre digo que personas de 10 puntos crearon países para nosotros que somos personas de 6 o 7 puntos. ¿Por qué sostengo que todos nosotros somos de 6 o de 7 puntos?  Pues bien, primeramente porque no podemos pensar en grande cuando vemos la realidad. Seamos sinceros, carecemos de la Calidad Humana de Nuestros Padres Fundadores.    
 El segundo motivo es que muchos somos ciegos al vislumbrar el futuro. Cuando salvajemente atacaron el World Trade Center sentimos un dolor y una tristeza inconmensurables, pero, pensamos que se trataba de algo lejano a nuestros países.
  Pensamos equivocadamente que era un problema de Estados Unidos y la Verdad era que se trataba de un Ataque Total a los Valores de Occidente que tanto Amamos y Compartimos.
   El tercer y más importante motivo para sostener un  pensamiento tan negativo en cuanto a la percepción de mi generación es que somos apasionadamente sordos al escuchar a los disidentes y tomamos las críticas de nuestros adversarios tan mal que nos volvemos sus enemigos sin recapacitar en que ninguno de nosotros posee la Verdad Absoluta.
  Algo pude compartir el 20 de junio sobre Belgrano y la Bandera, sobre la Logia Lautaro, de la cual eran parte Alvear y  San Martín, y sobre el camino argentino hacia la Libertad.
  Ahora quiero hablarles del momento en que la cosa se puso pesada, como decimos por acá. Al inicio de 1816 la contra revolución avanzaba por América.
 Abuela Laura, odiadora de todos los fascismos me lo contaba así; “estaban los españoles retomando la América India, destrozando a los Patriotas sin importar si eran mujeres, hombres o niños y San Martín vino a salvarnos”.
  Sería muy gracioso pensar que estuvo en Europa hasta la Segunda Guerra Mundial  si uno no recuerda como se entregó la viejita a la Causa Sanmartiniana en Cuerpo y Alma.
  Dicen los días del Tiempo que los Patriotas efectivamente estaban derrotados, o eso parecía, en Venezuela, México y Nueva Granada. Tanta sangre se había llevado el río, tantas esperanzas pisoteadas, pero, Bolívar había escapado y San Martín estaba  concentrando su tropas o el inicio de ellas en Mendoza, Argentina.
  San Martín estaba preparando un ejército para cruzar los Andes y así colaborar en la liberación de Chile y Perú. Contaba con el apoyo incondicional de O ´Higgins, lo cual en términos futbolísticos es como tener a Maradona y a Messi en el mismo equipo.
  La situación estaba “Chunga”. Por el este de la América del Sur se sumaba como amenaza el avance de los portugueses a la Banda Oriental, donde el patriota Artigas se hacía cargo de la Resistencia.
  San Martín necesitaba que se dicte la Independencia, de inmediata para poder atacar a los realistas en Chile y los de Buenos Aires, como la mayor parte de nuestra historia dormían la siesta o se hacían los osos.
  Al final tuvieron que  despertarse y convocar un Congreso en Tucumán pero eso se los explico en la próxima.

Lía Olga Herrera Soto 

Feliz Día de l@s Amig@s!!!

 Para Sra. Saori and Sr. Yasuhiro Akimoto Hoy es Navidad, mis Amig@s de Atenea en Armas, aunque ustedes no lo sepan. Porque en Argentina c...